*Mientras Solidaridad se encamina al semáforo rojo por el alza en los contagios de coronavirus, la alcaldesa simulo compras de materiales y pruebas contra la enfermedad
Redacción/Sol Quintana Roo/La Opinión de México
Playa del Carmen.- Con el fin de allegarse recursos extras para llenar sus bolsillos a costa del sacrificio de los playenses, la presidenta municipal Laura Beristain Navarrete, simuló compras de pruebas Covid-19.
Para ello se valió de la pseudo empresa “Medicamentos e Insumos para la Salud (Medipsa S. de R.L. de C.V.), con domicilio fiscal en Mérida, Yucatán; a la que de manera directa y sin comprobar los recursos suficientes, le asignó el contrato DPM/AD-ADQ-001-2021, por $5,861,655.00 (Cinco millones ochocientos sesenta y un mil seiscientos cincuenta y cinco pesos 0/100 MN).
La prueba fehaciente de que los supuestos exámenes para detectar el coronavirus, es solo una cortina de humo, es que la ola de contagios sigue en aumento, los hospitales Covid-19 registran más del 60 por ciento de ocupación en Solidaridad, y según los pronósticos de expertos en la salud, la cifra de muertos entre enero y junio de este año, podría alcanzar la misma que se tuvo en todo 2020 por el SARS-COV-2.
Y es que mientras la cifra de personas contagiadas por Covid-19, sumaban esta semana en el municipio de Solidaridad, Quintana Roo: 3 mil 735 casos acumulados, con 321 defunciones, la reina de los despilfarros fantasma, ridículamente asegura que, con la compra de las pruebas, poco a poco se ha venido aplanando la curva, cuando los números señalan lo contrario.
Que se podría esperar de una servidora pública que se vale del erario para engrosar sus cuentas bancarias en su afán de seguir mamando de la ubre presupuestal por tres años más. Así que ahora con el pretexto de combatir la pandemia, destinó tal cantidad millonaria por la “Adquisición de pruebas para la detección de Covid así como insumos y medicamentos”.
En total fueron: 10 mil kits de pruebas rápidas de diagnóstico in-vitro para la detección cualitativa de antígeno de Covid-19 (SARS-COV-2), en hisopado nasofaríngeo panbio (Abbott), que supuestamente se aplicaron entre enero y febrero de este año, y se pagaron a razón de 480 pesos la unidad, dando un total de 4 millones 800 mil pesos más IVA.
El resto de la cuenta millonaria se dividió entre 220 kits de protección a razón de 385 pesos cada uno ($84,700.00); 80 tabletas de valaciclovir de 500 mg a 449 pesos la pieza ($35,920.00); 150 tabletas de nitazoxanida 500 mg por 120 pesos cada una ($18,000.00). Más la suma de $3,450.00 por 50 cajas de Alin 0.75 mg con 30 tabletas a 69 pesos la pieza.
Otros medicamentos recomendados para enfrentar los síntomas del Covid-19 desglosados en el documento, fueron el Ibuprofeno de 400 y 600 mg, de los que se facturaron 250 tabletas de cada una a razón de 29 pesos la pieza del de 400 mg ($7,250.00), y 39 pesos la de 600 mg ($9,750.00). 200 tabletas de loratadina con betametasona, fueron pagados a razón de 48 pesos la pieza ($9,600.00).
Por la compra de 10 piezas de Thioctacid de 600 hr, se pagaron $9,300.00 a razón de 930 pesos cada una; de 500 cajas de paracetamol 500 mg fueron $5,500.00 por el pago de 11 pesos la pieza; y por 100 unidades de Dexametasona solución inyectable de 8 mg, a 23.58 pesos la pieza, fueron $2,358.00.
Los fármacos más onerosos además del Thioctacid, fueron el Apixaban comprimidos de 691 pesos cada una de las 25 piezas reportadas ($17,275.00); 50 Combivent Respimat de 890 pesos cada una ($44,500.00), y el Pulmicort Turbuhaler, de 650 pesos cada una de las 50 piezas adquiridas ($32,500.00).
En total fueron 5 millones 80 mil 103 pesos, a los que después de agregar 781 mil 552 pesos por concepto de IVA, dio el total de 5 millones 861 mil 655 pesos, que fueron pagados por la Dirección de Salud Física y Mental del municipio, de acuerdo a oficio de suficiencia TM/DCP/027/2021, emitido por el director de Control Presupuestal en fecha 18 de enero de 2021.
En el papel todo se ve muy bien, pero habría que cuestionarle a la experta de los contratos dudosos, la alcaldesa Beristain ¿Dónde fueron repartidos esos medicamentos? Cuando esa es una de las principales quejas de los derechohabientes en los centros de Salud: La falta de los mismos.
El contrato se suscribió bajo el procedimiento de adjudicación directa, y tuvo una vigencia del 22 de enero al 28 de febrero del año en curso. Fecha en que Beristain Navarrete declaraba a los solidarenses que podían confiar en las medidas tomadas en torno a la salud, pero la sociedad nunca tuvo claridad sobre el proceso de las pruebas, por lo que, las que se hicieron, fueron sin duda las obligatorias para tomarse la foto, y después no se supo nada más de las mismas.
Todo fue pura simulación, como es costumbre de esta administración, en la que Laura Beristain siempre está inmersa en escándalos de corrupción.
CONTRATO DUDOSO
En claro detrimento legal de lo estipulado en el contrato mismo, Laura Beristain Navarrete a través de sus socias en el desvío de recursos públicos: Yazmin Janette Díaz, oficial mayor, y Shelina Abigail Alonzo Alamilla, tesorero municipal; firmaron contrato con el yucateco David Rodríguez Gual, sin reunir éste las condiciones legales, técnicas y económicas requeridas.
De acuerdo al documento del que tenemos copia, la propuesta técnica y económica presentada por su socio en Mérida para hacer esta clase de negocios, establece que Medicamentos e Insumos para la Salud (Medipsa), cuenta con el Registro Federal de Contribuyentes: MED1209107K3 y con el Registro del Padrón de Proveedores PV,-3600. Aun así, se denota su calidad de empresa facturera al mejor postor.
Es una “empresa” registrada ante el Registro Público de Comercio de Mérida con Folio Mercantil Electrónico 53834, constituida con apenas 5 mil pesos de capital inicial. Con una inversión tan pequeña, ni una tienda de abarrotes “de casa”, podría estar surtida, menos una distribuidora farmacéutica.
Vamos, es una de esas compañías fantasma, de las que buscas por internet y te encuentras que pese a presentarse como comercializadora de productos farmacéuticos, no cuenta con punto de venta como tal. Sus transacciones comerciales las desarrollan por medio del correo electrónico [email protected], o el teléfono 9991962666.
Buscando más información sobre ella, encontramos que antes de los contratos adjudicados de manera directa por la alcaldesa playense, Medipsa solo registra una transacción anterior que data del año 2015, por un total de 15 mil 642 pesos, a través del almacén delegacional en Yucatán.
En isla.merida.gob.mx, portal donde se registra la actividad comercial de al menos 1 mil 540 entidades proveedoras de Yucatán, no se encontró huella de un solo registro contable de Medipsa entre 2016 y 2020 en Mérida, ni uno solo.
El proveedor sin duda declara con falsedad al asumir que, para cumplir con el contrato, cuenta con la capacidad técnica, así como los recursos humanos, materiales y financieros necesarios para la adquisición de los bienes que requiere el municipio. Razón por la cual, la alcaldesa la utiliza como una cortina de humo para hacerse de sumas millonarias a través de supuestas compras, o al menos diezmadas.
A nadie extrañará el día que esta empresa aparezca publicada en la página del Servicio de Administración Tributaria (SAT), o en el Diario Oficial de la Federación, relacionada como Empresa que Factura Operaciones Simuladas (EFOS) en términos del artículo 69 B del Código Fiscal de la Federación; por la que podrían llegársele a fincar responsabilidades.
FAVORITISMO REPETITIVO
En su afán de enriquecerse más cada día, así sea ilícitamente, Laura Beristain Navarrete aprovecha cualquier situación para meterle uña al presupuesto de Solidaridad. Una vez que fue declarada la pandemia y se empezaron a tomar medidas para amortiguar sus efectos entre la población en 2020; la gobernante tomó a la empresa Medipsa S. de R.L. de C.V., como una de sus preferidas para la aparente compra de insumos médicos.
Por medio del contrato DPM/AD/ADQ/006/2020, benefició a la farmacéutica con un monto de $3,392,420.00 (Tres millones trecientos noventa y dos mil cuatrocientos veinte pesos 0/100 MN), para la adquisición de cuatro mil frascos de gel antibacterial de galón a 344 pesos más IVA cada uno; 16 mil botellas de gel de un litro a razón de 86 pesos cada una más IVA, y 50 mil cubrebocas plisado por 3.45 más IVA la pieza. Mismos que según destacaba el contrato, serían entregados a la población. Y no fue así.
Pero no estuvo conforme con pagar un cubrebocas en unos 4 pesos. No, necesitaba comprarlos más caros, por lo que Beristain aparentemente compró 300 mil máscaras quirúrgicas o de aislamiento para personal médico (cubrebocas) a la empresa “Marjos Ingeniería, S. de R.L. de C.V.”, a razón de 9 pesos más IVA cada una, por las que se pagaron $3,132,000.00 (Tres millones ciento treinta y dos mil pesos 0/100 MN), cuando un paquete de 10 cubrebocas costaba unos 20 pesos en cualquier farmacia en esos días.
Sobra decir que estos insumos, jamás fueron entregados a la sociedad playense como se aseguró.
No cabe duda, mientras no se dé por terminada la contingencia de salud que vivimos desde abril de 2020, Laura Esther Beristain Navarrete, seguirá acudiendo a empresas factureras para justificar gastos millonarios bajo el supuesto de “atender la contingencia sanitaria y económica” provocadas por el Covid-19.