*Bélgica alerta a México sobre fabricación en impresoras ‘3D’
*Crece producción de armas y componentes de plástico sin serie
*Cañones, detonadores y cámaras de explosión siguen en metal
*También crecen los ‘lavaderos de cocaína’ americana en Europa
Corresponsalías Nacionales/Grupo Sol Corporativo
Ciudad de México. – Armas y componente –con diseño rápido y barato– son trazadas y fabricadas con impresoras ‘3D’. Ahora, las piezas metálicas, detonadores y cámaras de explosión, son aditamentos y, su rastreo e identificación es muy difícil por ser de plástico y sin números de serie.
Hasta hace poco, eran incosteables e inseguras, pero en los últimos años, esta tecnología han tenido una evolución acelerada, que permite una amplia variedad de materiales que se desarrollan y lanzan en forma constante.
El Gobierno de Bélgica alertó al de México sobre nuevos desafíos que ofrecen a la delincuencia organizada la tecnología ‘3D’.

En una comunicación catalogada como urgente bajo el número 512 H.1/1 del 30 de julio de 2022 la Embajada de México en Bélgica concurrente con Países Bajos/Bruselas, Bélgica, remitió información sensible al agregado militar Coronel de Caballería J.O. Vázquez Uscanga.
También se destaca que, de acuerdo con informes de las autoridades policiales locales, después de la pandemia ocasionada por SARS-CoV-2, se registró un incremento en la introducción de drogas ilícitas y armas de fuego a esta nación.
El trasiego se hizo, principalmente, por el puerto marítimo de Amberes, Bélgica, el cual forma parte del denominado “Eje Róterdam-Amberes-Bruselas”.
Derivado de lo anterior, se logró descubrir una nueva técnica para transportar cocaína llamada coloquialmente “lavadores de cocaína”.
Los reportes confidenciales indican que “consiste en impregnar con una solución de cocaína, materiales inertes tales como ropa, carbón vegetal, fibras de coco, entre otros artículos), para posteriormente extrae químicamente dicha droga en un “lavadero” y ser reacondicionada para su distribución.
A últimas fechas, la Policía Judicial Federal (PJF) desmanteló en Bruselas, Bélgica seis laboratorios de extracción de cocaína.
Además, la PJF logró desarticular una organización criminal internacional que había traficado varias toneladas de cocaína a través de Bélgica, se ejecutaron 64 arrestos, se incautaron decenas de botes que contenían químicos, una docena de armas de fuego, 57 vehículos entre ellos varios autos de lujo.
También, artículos de lujo, una gran cantidad de monedas de oro, una máquina contadora de dinero, casi un millón de euros en efectivo y 300 metros cúbicos de tabaco de contrabando.
Asimismo, se incautaron equipos utilizados por los delincuentes para pasar desapercibidos a la policía: dispositivos técnicos, ‘jammers’, balizas, detectores, drones y motores de propulsión para buzos.
IMPOSIBLE ARMAS ‘3D’
Expertos de la empresa 3D Works afirman que, aunque es cierto que se han creado armas de fuego utilizando la tecnología de impresión ‘3D’, estas armas no son prácticas ni seguras para su uso.
La razón principal por la cual no es posible crear armas de fuego completamente funcionales con impresoras ‘3D’ es que los mecanismos que permiten el disparo y el cañón tienen que ser de metal para soportar el trabajo.
El plástico utilizado en la impresión ‘3D’ no es lo suficientemente resistente como para soportar la explosión que se produce cuando se dispara un arma de fuego.
“Incluso si se logra imprimir un arma de fuego completamente de plástico, esta tendría una precisión de disparo nefasta e incluso podría explotar en las manos del usuario”, indican.
Es cierto que existen casos de armas de fuego de plástico impresas en ‘3D’ que se pueden disparar una vez, pero esto es más un experimento que una solución práctica, añaden.
Lo que sí se puede hacer con la tecnología de impresión ‘3D’ son accesorios para armas de fuego, como cargadores, miras y empuñaduras, entre otros.
Dichos accesorios se pueden imprimir en plástico y se pueden comprar legalmente en distintas plataformas. Sin embargo, la calidad y durabilidad de estos accesorios pueden ser inferiores en comparación con los accesorios fabricados con métodos específicos de fabricación.
La fabricación mecanizada CNC y el forjado, producen armas de fuego con una calidad y durabilidad superiores. La impresión ‘3D’ en plástico es una solución muy elaborada a muchos problemas de fabricación, pero no es la mejor opción para fabricar armas de fuego.
Explican que la impresión en metal, aún se encuentra en desarrollo y no es viable para la fabricación de armas de fuego. Las impresoras ‘3D’ que utilizan metal como material de impresión tienen un costo muy alto y solo están disponibles para grandes empresas.
Dicha tecnología requiere de personal altamente capacitado para su operación, lo que aumenta costos de producción.
Incluso si fuera posible imprimir las piezas de un arma en metal, el proceso de mecanizado CNC requerido para crear un cañón o preparar el sistema de disparo sería extremadamente costoso e inviable en comparación con las técnicas utilizadas por los armeros actualmente.
BÉLGICA RECONOCE PROBLEMAS POR DROGAS
En la actualidad, el tráfico de drogas y armas genera importantes problemas en el país; indica el gobierno de Bélgica.
“Se ha detectado que las drogas son introducidas a través del Puerto Marítimo de Amberes, Bélgica y en menor escala por el Aeropuerto Internacional de Zaventem, Bruselas; se ha observado que en su mayoría los estupefacientes provienen de Latinoamérica”.
El Ministerio de Justicia por conducto de la Dirección Central de Lucha contra la Delincuencia Grave y Organizada (DJSOC por sus siglas en inglés) dependiente de la Policía Judicial Federal, se encarga de los asuntos relacionados con el tráfico de drogas y aunque se tienen cooperaciones internacionales ya se vive un grave problema.
En 2021 se realizaron un total de 174 incautaciones de cocaína en tráfico marítimo y aéreo principalmente.
Los puertos marítimos son eslabones importantes en el tráfico de cocaína desde América del Sur hacia Europa Occidental.
INCAUTAN ARMAS ‘3D’ EN PAÍSES BAJOS
Bélgica y Países Bajos han establecido importantes mecanismos de cooperación con otras naciones para reforzar su lucha contra el tráfico de drogas. Los mecanismos han permitido el mapeo de flujos de dinero, el intercambio de información con expertos internacionales y la facilitación en los procesos de extradición de líderes criminales.
Junto al tráfico de drogas, se ha observado en Bélgica y Países Bajos, un aumento en el tráfico de armas; al respecto, revisten especial interés las nuevas armas fabricadas en plástico con impresoras ‘3D’, debido al crecimiento exponencial de las ventas de estas armas y de sus componentes, las cuales son difíciles de detectar y rastrear, por ser fabricadas en plástico y carecer de números de serie.
El gobierno de Bélgica, explica: “se prevé que las armas fabricadas por impresoras ‘3D’ lleguen a un nuevo grupo objetivo, personas que no están propiamente en el circuito criminal, pero desean tener un arma de fuego, tales como las personas con ideas extremistas, potenciales terroristas”.
La legislación actual de Bélgica y Países Bajos no prohíbe la publicación o distribución de diseños de armas ‘3D’, por lo que se observa un nuevo desafío que deberá ser atendido a la brevedad.